Caliu Talks 01: Tessa Muga

Caliu Talks 01: Tessa Muga

En Caliu, nos esforzamos por compartir las historias detrás de nuestros productos y la visión que impulsa nuestra marca. Hoy, estamos emocionados de sumergirnos en el mundo creativo y apasionado de Tessa Muga, la mente maestra detrás de Somos NidoCaliu.

Desde la cálida esencia de Somos Nido y ahora de Caliu, una tienda online de muebles y decoración, Tessa ha llevado su visión a nuevos horizontes. Esta entrevista es más que una exploración de productos o la simple introducción de una marca, es un viaje íntimo a través de la inspiración, la creatividad y el compromiso con la palabra hogar.

Descubre las experiencias, los desafíos y las alegrías que han dado forma a Caliu y prepárate para inspirarte con Tessa.

 

¿Por qué Caliu?¿Qué es Caliu para ti? 

Caliu es una palabra catalana que se refiere a las brasas que quedan en el fuego, nosotras lo interpretamos como todo lo que abarca el calor del hogar. Esa sensación de refugio que abrace todas tus facetas, todo tu ser y que cuando entres en ese espacio estés realmente acogida y te sientas identificada, arropada. El caliu es eso, no el estar delante de la chimenea tumbada leyendo un libro, sino el ruido en la noche de tener a los hijos correteando con el pijama recién duchados, verlos dormidos, quedar con las amigas para tomarse algo y hablar de todas las cosas de las que normalmente no tienes tiempo para hablar… Son momentos que son pocos pero que cuando son sientes ese calor de hogar. No tiene porque ser perfecto, si te sientes acogida, si te sientes bien, es caliu.

 

¿Qué te empujó a crear Caliu?

La verdad es que hay momentos en los que me pregunto por qué me lancé a crear Caliu… (ríe) Pero me empuja el hecho de crear un impacto cuanto más amplio mejor. Pienso en la imagen de lanzar una piedra al río y verla rebotar, creando una onda expansiva. Algo en mí le gusta esa idea de onda expansiva para llevar a la gente a su hogar. Empezamos por una inmobiliaria con The Home Hunter, queriendo que la gente encontrase un piso con una buena base, luego nació Somos Nido con la idea de transformar los espacios, dignificarlos y darles identidad. Ahora nos lanzamos con Caliu para crear una línea de muebles que hace que todo encaje y que, si tú no puedes o quieres hacerte una obra en casa, sepas donde acudir para saber que los elementos que vayas a poner te vayan a dar caliu desde el primer momento.

 

¿Cuál es la inspiración detrás de la tienda?

La base de todo esto, y por eso se llama así la marca también, es que nuestro estilo es el caliu. Cada uno tiene su identidad, sus gustos, y son todos lícitos. Da igual lo que tengas, mientras tenga ese caliu. Por eso nuestra primera apuesta son piezas que no tienen un estilo muy marcado, que combinan fácilmente y que suponen una base para seguir creando. Nuestra tienda es online (de momento) pensada para que todo el mundo encuentre un espacio donde navegar, que sea bonito y divertido y que no ofrezca un gran margen de error, es decir, que pida lo que pida es una pieza duradera, con una historia detrás, elegida por un grupo de profesionales que saben que funciona.

 

¿Qué tipos de muebles vamos a poder encontrar en Caliu?

Nosotras trabajamos con un sistema de capas en Somos Nido que hemos recogido a la hora de lanzar esta primera colección. La capa uno son los básicos para vivir en una casa: sofá, mesa, sillas… Y la capa dos sería lo que crea la coherencia de esos elementos: alfombras, cortinas, piezas de arte grandes… Por último, también nos hemos centrado en la iluminación. Porque eso es algo que tengo muy claro que pongas lo que pongas, si lo tienes mal iluminado, no sirve de nada. Esos tres grupos son lo que yo he echado más en falta bajo mi propia experiencia comprando mobiliario.

 

¿Qué diferencia a Caliu de otras marcas?

Es cierto que ahora hay muchísimas marcas a las que acudir, pero para mí lo que más nos diferencia es la empatía y la experiencia del consumidor. Quiero que la gente como yo tenga un espacio donde poder ir a comprar muebles, aunque sea online. Lo que nos hace distintas es el caliu, pero en el amplio sentido de la palabra, es decir, la cercanía, el trato, la selección de los muebles… No es mecánico, sino que estamos escogiendo y curando muchísimo todo lo que entra, sabiendo que esos muebles ya los hemos utilizado, los hemos vivido y nosotras mismas también los compraríamos. La idea es que cuando alguien entre en nuestra web, sienta esa diferencia. También le queremos dar mucha importancia a construir un estilo de vida que sea sostenible, con piezas que van a ser duraderas, que si quiero cambiar de estilo van a estar conmigo y, de ese modo, poder crear un fondo de armario de muebles.

 

¿Cómo se reflejan estos valores en la selección del producto y en la experiencia del cliente?

Si algo ha sido importante para mí en mi carrera, tanto en The Home Hunter, como en Somos Nido, como ahora en Caliu, es el cliente. Empecé con una inmobiliaria por mis malas experiencias de usuaria como buscadora, empecé Somos Nido por varias malas experiencias con las reformas y el interiorismo y ahora empiezo Caliu desde ese mismo sitio. Por eso me gustaría que todos nuestros clientes tuvieran un espacio donde sintiesen cercanía, aunque sea online.

Caliu es un proyecto hecho en casa y eso significa que, seguro que van a surgir inconvenientes y problemas, pero sé que si los hay los vamos a enfocar y vamos a dar una respuesta y estaremos cercanas siempre. Por eso también buscamos un tipo de cliente que piense así, alguien comprensivo, empático, que le haga ilusión estar aportando algo a una marca que acaba de nacer. Me gusta que exista lo imperfecto y nuestra marca va a tener imperfecciones, pero yo vivo muy feliz y contenta en esta imperfección, porque eso hace que Caliu sea algo vivo y natural.


¿Qué sentimiento esperas que tengan las personas que interactúan con los productos de Caliu?

Sigo insistiendo en esa onda expansiva de la que he hablado. Quiero que sientan, y es un poco arriesgado decirlo lo primero quizás, pero esa maravillosa imperfección del ser humano. Estamos en un momento tan tecnológico, con tantas pantallas y tanto perfeccionismo, pero también mucha deshumanización. Por eso pienso en esa primera reacción al recibir el pedido, esa cara de felicidad, esa ilusión.

En esa misma línea, queremos recuperar la idea de regalarte algo a ti mismo, hacer algo por ti. Cuando nos vamos haciendo mayores y, aún más, cuando llegan los hijos, muchas veces ya no nos dedicamos tiempo de ir de compras, de tomarnos un rato para cuidarnos. A veces nos llegan paquetes y ya ni nos acordamos de lo que hemos pedido. Pero yo me imagino eso, el poder decir “me acabo de autorregalar el sofá que siempre he querido”. Quiero que piensen en ese concepto de autorregalo, de dignificarse a uno mismo.


¿A la hora de decorar un hogar sois partidarias del menos es más?

Si soy sincera, no. A mí me gustan los espacios vividos, supongo que me viene de familia. Mi abuela era mexicana y vino a vivir a Euskadi. Para adaptarse, ella se trajo su pedacito de México aquí y me acuerdo entrar de la calle gris a su casa y era un mundo de color espectacular. Al final yo mamé eso toda la vida. Y me encanta, porque un espacio vivido, lleno de color, de tejidos… Todo eso quiere decir que tienes recuerdos en casa.


¿Cuál es el proceso a seguir para decorar una casa sin perderse?

El proceso más fácil para no perderte es el sistema de capas que sacamos en Somos Nido. La capa uno son los básicos y la capa dos esos elementos que aportan la coherencia, como ya he explicado. La capa tres es lo que llamamos el attrezzo, es decir, los cojines, libros, jarrones más pequeños… Y por último la capa cuatro, que es la iluminación. Caliu se basa en ese sistema de capas que, por supuesto, vamos a compartir con los usuarios para que conozcan el sistema, aprendan a usarlo y puedan ir entendiendo como rellenar los espacios y si les falta algo o no.

Muchas veces cuando queremos hacer un cambio en casa nos centramos sobre todo en la capa tres, pero en realidad quizás a tu salón sólo le hace falta una gran alfombra que ayude a enmarcar el espacio y lo haga mucho más amplio. Nuestra idea es enseñar a los clientes a usar esas capas en sus casas y, obviamente, tener material y producto que sea coherente con ese sistema.


¿Qué relación guardan Caliu y Somos Nido?

Esa idea de caliu parte de Somos Nido, pero creo que estos dos proyectos se parecen sobre todo en la base empresarial. Somos Nido se llama así porque siempre me había imaginado un nido de personas, de profesionales, junto a los que trabajar y cambiar el sistema laboral en lo poco que se pudiese. Estaba centrada en crear espacios bonitos de trabajo, con equipos chulos donde la gente se pudiese desarrollar e incluso que lo usaran de trampolín para ir hacia otros proyectos que les pudieran interesar, eso me enorgullece muchísimo. Caliu sigue esta línea, con un equipo detrás increíble en el que confío y delego, que permitan que el cliente esté contento y donde se cree una atmosfera y ecosistema guay.

E igual que en Somos Nido, estamos intentando trabajar con proveedores que conocemos, lo más cercanos posibles, intentando que todo sea quilómetro cero. Esto a veces resulta complicado, porque queremos precios que sean cercanos a la gente, pero continuamos trabajando dentro de nuestro pequeño impacto sostenible. Queremos cuidar todo este universo Caliu, que también es universo de Somos Nido.


De cara al futuro, ¿Hacia donde crees (o te gustaría) que evolucionase Caliu?

Yo tengo mucha imaginación desde pequeña y soy muy soñadora… Pero me encantaría vivir lo que es crear una gran empresa, con todo lo que eso conlleva, querría ver algo muy potente donde haya un gran equipo, que seamos bastantes y lleguemos muy lejos. Que esa onda expansiva se agrande. Ahora mismo no veo límites en Caliu en ninguno de los aspectos. Por supuesto, también me gustaría hacer producto propio, lo más sostenible posible, conocer nuevos proveedores, experimentar con nuevos materiales… Lo veo infinito, hay mucho futuro.


¿Qué consejo le darías a otros emprendedores que están empezando en el mundo del diseño y la decoración?

Sobre todo, les diría que mucho ánimo. Es un camino muy duro y solitario. Alguien me comentó una vez: “Nunca tienes a quien mirar atrás” y siempre lo pienso. Te van llegando cosas, preguntas, dudas… Y cuanto te giras no hay nadie para ayudarte y esa sensación… Me emociona incluso, esa soledad. Pero hay que ser fuerte, hay que lanzarse, porque esto es como tener hijos, nunca es el momento perfecto.

La palabra emprendedora hoy en día es muy extensa, hay que asesorarse bien, sobre todo si empiezas de cero, como en mi caso. Hay una parte negativa, obviamente, no va a ser el mejor camino de tu vida ni el más fácil, va a ser duro, pero también muy gratificante. Y hay que ser valiente, hay que estar continuamente fuera de tu zona de confort y saber que no hay nadie que vaya a responder por ti. Estás en continua locura de entender quién eres, adaptarte a la rapidez de la empresa, a las complicaciones, a esos desiertos económicos tan agobiantes (que también los hay). No sé si esta respuesta va a darle ánimos a algún emprendedor (ríe), pero no hay que asustarse. A todo el mundo que tenga una idea, que la emprenda. Para mí ha sido increíble y sigue siéndolo, con sus decepciones, su dificultad y sus complicaciones

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